sábado, 5 de junio de 2010

Felicidad y umbral de pobreza

Segunda parte relacionada con el artículo de mi colega escritor Germán G. donde busca correlaciones positivas -o negativas- entre dinero y felicidad

Veamos: Hay una frase clásica en círculos acomodados: Los pobres no tienen mas que trabajar y estudiar y saldrán de su condición de pobreza.

Veamos : Si trabajo 15 horas al día en una mina de esmeraldas, intento simplemente sobrevivir (Cf. Maslow). Jamás (amén de oportunidades) tendré el tiempo /energía /motivación /medios para salir de aquí.

Entonces, ¿cómo se puede romper el techo -umbral- de la pobreza?. Nota: este umbral no es algo estático, depende de los países, cultura, etc... y podéis ver que puede ser un acercamiento a cómo ligar felicidad y medios económicos.

Por ejemplo, en un país avanzado, una persona puede tener un trabajo digno y algo de seguridad para su familia (nivel 2 de la pirámide de Maslow). Puede incluso estar pagando una hipoteca y sin embargo, estar por debajo del umbral de pobreza, por chocante que parezca.

Así que debemos buscar primero otra definición para este umbral. La más sencilla sería la siguiente. Estoy por debajo del umbral de pobreza -felicidad- si vivo y trabajo en los niveles 1 y 2 de la pirámide. De otra forma, si todas mis energías van dedicadas a alimentarme a mí y a mi familia y a darles seguridad y educación.

¿ Porqué llamar a este umbral, el umbral de pobreza?. Pues, porque estoy en un estado en el que no puedo romper mi techo socio-cultural. Puedo trabajar más, pero no puedo pegar el salto cuántico hacia otro nivel socio-cultural, y, en el mejor de los casos, quienes sí lo conseguirán, serán mis hijos.

Sigamos matizando. Como lo estamos viendo, estar por debajo del umbral de la pobreza no significa que me esté muriendo de hambre. Significa que mis recursos están dedicados a tareas de mantenimiento en lugar de a tareas de desarrollo.
Esto le puede perfectamente ocurrir a un alto ejecutivo con "alto" poder adquisitivo. Dedica sus esfuerzos a pagar una hipoteca. Esa hipoteca será de 3.000 € al mes, cuando la hipoteca de un administrativo será de 500 € mes.

Sin embargo, el resultado final es el mismo. No importa lo que ingrese. Lo que determine que esté por debajo del umbral de pobreza, es la cantidad de recursos que pueda dedicar a mi desarrollo personal –léase felicidad– (o al de los míos).

Con lo cual, curiosamente, tenemos un alto porcentaje de personas por debajo de dicho umbral –infelices– en urbanizaciones de medio lujo o incluso de lujo.

Para completar esta disertación, y pensando en la metáfora del pato en la charca, habría que desarrollar el tema analizando las correlaciones entre información y felicidad. Será para una próxima ocasión ...

2 comentarios:

  1. ¡Qué buen post! Según esto, una inmensa mayoria de los habitantes de la tierra estarían bajo el umbral de pobreza...

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  2. ¡ Hola Jorge !!

    Pues me temo que por ahí, por ahí van los tiros ... De paso, ya he redactado otro post sobre índices de felicidad, a ver qué opinas :)

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