Amigo lector, nunca te has planteado el por
Una primera idea – evidente - consistiría en pensar que alguien colocó las teclas al azar. Otros pensareis que el que diseñó el teclado simplemente se equivocó a la hora de definir cuáles eran las teclas más utilizadas.
Otros pensareis que el que diseñó el teclado era de nacionalidad austro-húngara, manejando un idioma tan extraño que las teclas más utilizadas pudieran ser una combinación de z, x, w y q, etc
La realidad es más sencilla. Estos teclados fueron diseñados hace más de un siglo, en la época de las viejas máquinas de escribir – las Remington de toda la vida -
¿ Y qué pasaba por aquél entonces? Pues que las mecanógrafas tecleaban con rapidez. ¿ Y qué pasaba cuando tecleaban con algunos de los primeros teclados. Pues sencillamente, las varillas se trababan, porque la máquina de escribir no estaba preparada para aceptar un ritmo de teclado tan elevado.
Solución: vamos a colocar las teclas de tal forma que la gente tenga que teclear más despacio, buscando las letras en lugares ilógicos.
Un siglo después, cuando ya no hay ni varillas, ni elementos mecánicos que intervengan en el proceso de redacción, seguimos con un teclado que es – diciéndolo suavemente – un insulto a la inteligencia.
Me objetarás, amigo lector, que tampoco es para tanto. Al fin y al cabo, que tecleemos un poco más despacio o un poco más rápido, ¿ qué más da ?
Veamos. Supongamos que ese diseño tan poco ergonómico implique una pérdida de un 25 % - seamos positivos - en la rapidez de teclado de todas las personas que a diario utilizan un teclado QWERTY (o AZERTY, lo mismo da). Bien, de cuántas personas estamos hablando ¿ 10 millones (uno de cada 600 humanos, ¿ parece razonable.
Cuál es el coste de cada una de esas personas para sus respectivas empresas. Digamos 20.000 €/año. El 25 % sería 5.000 € / año. Multiplicado por 10 Millones de personas, eso nos da, 50.000 millones de €. Digamos que sólo dedican una quinta parte de su jornada a teclear, resultado final 10.000 millones de €.
¿ Esto es mucho, es poco ?. No lo sé, pero a lo largo de los últimos 100 años, ya hemos desperdiciado 1 billón de €. Todo esto debido a la pervivencia de un diseño antiguo – acertado en su época pero no cuestionado desde entonces.
yo lo que pienso es que todo esto es psicologico, recuerdo que hice un trabajo al respecto y a la conclusion que llegas es a lo facil que se puede adaptar el ser humano al uso del teclado u otras herramientas, en lo referente al teclado, si las teclas estuvieran ubicadas en posiciones diferentes se adaptaria uno sin ningun problema :)
ResponderEliminarBuen punto, Vlad.
ResponderEliminarYo estoy convencido de la enorme plasticidad de la mente humana, mucho mayor que los que no se atreven a ser creativos creen.
Razones para la esperanza :))
Buena entrada, JD. No se me había ocurrido nunca pensar en esto. No sé porqué, me había hecho la idea de que el orden qwerty era una cosa arbitraria.
ResponderEliminarCoincido con lo de la plasticidad del cerebro. Cuanto más se estudia, más escurridizo se vuelve 'atrapar al gato'. A lo mejor, si seguimos por aquí, dando la vara, es precisamente por eso... digo yo... RZ
¡ Hola Rafa !
ResponderEliminarTu comentario es muy revelador. Primero, efectivamente, vivimos rodeados de paradigmas de todo tipo que en general no cuestionamos.
Y segundo, como bien lo dices, si seguimos por aquí es porque algunos son capaces de cuestionar dichos paradigmas y hacernos evolucionar.
Aunque no quiera meterme en un jardín, pensemos simplemente en la Edad Media (u Oscura) donde cuestionar cualquier paradigma significaba un viaje directo a la hoguera :(
Pero cuidado, hemos de seguir alertas, ya que hoy en día las "hogueras" siguen existiendo, aunque de forma más sutil y perversa :((((