Estos días se está poniendo de moda el hablar Alemán. Un idioma complejo desde luego pero con varias características cuyo conocimiento nos puede ayudar, y que les detallaré a continuación, basado en una experiencia mía.
En el año 1.998 tuve que trabajar un par de meses en Alemania, rodeado de Alemanes que afortunadamente - o no, lo entenderán ahora- también hablaban Inglés. No hablando ni una palabra de Alemán tuve que tirar de ingenio para, por mi cuenta, salir del paso. Y ahora, como de costumbre, al igual que con el Francés y el Inglés, que me perdonen los filólogos puristas al presentarle mis trucos.
A - Primer apunte, sencillo: el Alemán es un idioma fonético (todo -todo !!- lo que se lee se pronuncia tal como se lee). Hay un matiz con las letras V (se pronuncia F), W (se pronuncia V), "EI" (se pronuncia "AI").
B - Segundo apunte: los sustantivos llevan mayúscula siempre. Esto resulta definitivamente muy práctico para leer el Alemán.
C - Tercer apunte: las frases se construyen "al revés", con el verbo al final de la misma. Sugerencia: cuando nos hablen, presten atención al final de la frase, y no tanto al principio.
D - Cuarto apunte (para los que hablen Inglés): el Inglés -simplificando- se creó a partir de dialectos Sajones (y luego con muchas aportaciones del Francés). Con lo cual, en Alemán Alto (el oficial) reconoceremos las fuentes de muchas palabras (en particular verbos) del Inglés actual.
Mi primer paso, al llegar a Stuttgart fue comprarme un diccionario de bolsillo y hacerme una lista de palabras Alemanas muy parecidas a su posterior evolución en Inglés, para construirme un vocabulario básico pero operativo. Aquí van unos ejemplos (Inglés-Alemán):
Drink - Trinken
Go - Gehen
See - Sehen
When - Wenn
Thinking - Denken
etc ...
En pocos días ya disponía de un vocabulario sencillo de más de doscientas palabras, y hablando en plan Gerónimo podía sobrevivir sin demasiados apuros en el día a día.
Y ya como anécdota, y para dar ánimos a todos, al final de mi estancia, un día en el hotel Maritime de Stuttgart, pude improvisar una pequeña presentación de una aplicación informática ante un grupo de Germanos, y creo que la entendieron (de hecho, ya en otros países seguí colaborando con esa empresa - Daimler- hasta el año 2.005).
Al principio, dejé entrever que el hecho que mis compañeros hablaran Inglés, en realidad no fue algo positivo, ya que siempre tenía el recurso -fácil- de hablar en ese idioma, lo cual no me obligó a desarrollar mi práctica del idioma. Y es que estoy convencido que a la hora de aprender un idioma, la inmersión total, por difícil que resulte al principio, es la única forma de aprender de verdad.
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Totalmente de acuerdo con el tema de la inmersión total. Lo último que recomiendo es apuntarse a un curso de idiomas (y mucho menos, si es de los caros).
ResponderEliminarLo digo con conocimiento de causa. No es que los cursos sean deficientes, ni mucho menos, pero el índice de retención al cabo de tres meses es bajísimo, y no digamos al cabo de un año.
Si uno realiza una "inmersión total" en una lengua (aparte de ahorrar mucho dinero), jamás olvidará esa lengua.
Yes Sir !!
ResponderEliminarMi aportación reiterativa :( es la siguiente: con unas reglas básicas, aunque reñidas con lo que se aprende en las academias, es que en un 95% de los casos unos trucos sencillos nos pueden ayudar a sobrevivir en un idioma ajeno. Y lo siento por la ortodoxia imperante :)
gracias,
ResponderEliminarnos vamos a Hanover y me siento en la misma situacion
Puff yo hace 5 dias empeze las clases d aleman en hannover y la verdad q me siento mal al ver q mis compañeros se defienden y lo hablan y yo no me entero d nada
ResponderEliminarGracias !!!!!!
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